Los capibaras están considerados los roedores más grandes del mundo. Su hábitat principal es Sudamérica, donde se les conoce con decenas de nombres. Como animales cazados por el hombre para alimentarse, en algunos países se consideran protegidos para evitar su extinción.
Al pertenecer a la familia Caviidae y al género Hydrophilidae, es un animal semiacuático que vive cerca del agua, lo que significa que necesita espacios húmedos para crecer. Y su nombre completo es: Capibara (Hydrochoerus hydrochaeris).
No son animales agresivos, pero su comportamiento es muy típico de su especie. Son capaces de adaptarse a lugares con presencia humana y convertirse en alimentadores nocturnos. Algunas personas tienen capibaras en casa, y estos mamíferos aceptan el espacio que se les proporciona como un lugar seguro donde protegerse de los depredadores.
Sin embargo, es importante recordar que se trata de una especie exótica que requiere cuidados especiales.
Características del Capibara
Aunque crecen hasta 130 cm, estos animales suelen verse entre 60 y 80 cm. En estado salvaje pesan una media de 45 kilos, pero en cautividad pueden llegar a pesar 70 kilos.
El cuerpo es compacto, ancho y muy fuerte, al igual que la cabeza. Tiene un cuello corto y una de las musculaturas más fuertes del capibara. Las orejas son pequeñas, planas y sin pelo. Su principal herramienta de trabajo es su hocico, por lo que es fuerte y compacta. Tiene un total de 20 dientes, pero son lo suficientemente fuertes para los roedores.
No tienen cola, pero sí una piel que protege las partes de su cuerpo. Las patas traseras del carpincho son más largas que las delanteras, lo que le permite huir con gran rapidez. Cuando corre, se apoya en dedos fuertes y muy gruesos, lo que también le convierte en un excelente nadador.
Hábitat del capibara
Este mamífero exótico vive principalmente cerca de grandes zonas de agua dulce. No son animales domésticos, pero no toleran los espacios abiertos. Prefieren construir sus propios agujeros llenos de barro para calentarse.
Aunque son rápidos, prefieren esconderse entre arbustos o hierba para evitar ser detectados por los depredadores. Necesitan grandes fuentes de agua porque están acostumbradas a nadar y pueden sobrevivir hasta varios minutos sin respirar mientras huyen o se desplazan de un lugar a otro.
Son mamíferos exóticos a los que les gusta vivir en manadas para protegerse unos a otros y defender a sus crías. Su comportamiento varía en función de las condiciones climáticas. En invierno, cuando hay grandes masas de agua y abundantes reservas de alimentos, prefieren permanecer en pequeños grupos o incluso en solitario.
En verano, cuando el agua escasea, prefieren pegarse para protegerse. Los límites entre grupos están marcados por glándulas odoríferas.
Dieta preferida de estos mamíferos
Su principal alimento son los pastos frescos y tiernos. Les gustan las plantas que crecen cerca de masas de agua, pero prefieren un mayor contenido de lignina para obtener la fibra que necesitan para sus músculos. Tienen especial preferencia por las plantas dulces. Por eso es frecuente encontrar capibaras en plantaciones donde se cultivan árboles frutales, caña de azúcar o cereales como el maíz.
Un notable comportamiento de forraje de los capibaras es su capacidad de persistencia. Tras alimentarse en una zona concreta, la abandonan para permitir que las plantas crezcan, sobre todo a medida que avanza la estación estival.
En cautividad, los criadores suelen plantar plantas ricas en fibra y azúcar cerca de los humedales para que se desarrollen de forma natural y reducir los niveles de estrés. Sin embargo, la caña de azúcar, la hierba real púrpura, la caña verde y cereales como el maíz constituyen la mayor parte de la dieta del carpincho.
¿Qué animal se come el capibara?
Sus principales enemigos naturales son félidos como jaguares y ocelotes, pero también zorros de la selva y caimanes. A veces las crías también son presa de aves rapaces como el águila arpía o reptiles como las anacondas.
Reproducción de este mamífero
La reproducción tiene lugar en condiciones en las que el macho puede perseguir a la hembra. La hembra no construye un nido para parir, sino que busca un lugar fresco para hacerlo. El número medio de crías es de 7, pero la mortalidad supera el 50%, por lo que solo sobreviven 2-3 crías.
El comportamiento, la velocidad y la fuerza de carrera son los principales accidentes que hacen que los terneros caigan al suelo y sean fácilmente perseguidos. La cría de capibara sobrevive en compañía de sus padres después de tres meses y se independiza a los seis meses de edad.
Los carpinchos alcanzan la madurez sexual a los dos años; las hembras lo hacen antes que los machos. Los machos pueden aparearse con una hembra hasta 25 veces al día para asegurar la fecundación. La gestación dura entre 110 y 150 días, según el hábitat.
Posibles depredadores del capibara
El capibara es una excelente especie de presa y se ve favorecido por muchos animales. Su carne es tierna, sin grasa, rica en pliegues y muy digerible. Esto significa que es constantemente cazada por animales, especialmente gatos y zorros. También está amenazada por caimanes y anacondas debido a su constante presencia en el agua.
Sin embargo, la población de capibaras se ha visto empujada al borde de la extinción por los humanos, que los cazan y se alimentan de su carne cuando estos mamíferos invaden sus campos.